La novela arranca con una anécdota: la boda de una joven de buena familia en Oviedo de 1923 con un tal Francisco Franco al que consideraban poca cosa para ella pero que fue el que marcó el destino de la protagonista de la novela, Gabriela y de todos los españoles de la época.
Está dividida en tres partes: Antes del sueño- El sueño -El final del sueño, que señalan las tres épocas de la historia que recorre la protagonista, desde su salida de la Escuela del Magisterio, en Oviedo hasta la Guerra Civil.
Entretanto con la República se pone en marcha un proyecto Educativo innovador: la Institución Libre de Enseñanza,
La creación de la Institución Libre de Enseñanza (ILE) fue obra de FRANCISCO GINER DE LOS RIOS.Eran liberales defensores de la INTERVENCIÓN DEL ESTADO en el aspecto SOCIAL y EDUCATIVO, y de la HONRADEZ y las VIRTUDES PÚBLICAS.
Joaquín Costa aseguraba que hacía falta “un hombre”, un líder que llevase a España por la senda de la modernidad. Pero Giner de los Ríos no le dio la razón. “HACE FALTA UN PUEBLO”, dijo.
Pero un pueblo con educación, entendiendo la educación en su sentido etimológoco: E-DUCO, sacar fuera, extraer todas las posibilidades que cada uno posee. ¿Qué es necesario para ello?. Voluntad y medios, que no es poco.
Después de este inciso entendemos a la protagonista, Gabriela (la madre de la autora, también maestra), que, después de enseñar (aprender a pensar, aprender a vivir) por pueblos hostiles y frios, limitados por la miseria y la geografía, decide hacer algo más y. después de aprobar las Oposiciones ELIGE lo más difícil, enseñar en la Guinea Española. Allí se entrega con entusiasmo a enseñar a unos niños de caras negras y dientes blancos que le sonríen agradecidos. Gabriela está convencida de que "El hambre de África no terminará nunca. África es la víctima del hombre blanco".
Termina esta estapa regresando a la península, después de haber contraído una enfermedad por el clima . Y comienza el sueño de la República con la alegría de las Misiones pedagógicas, que acercaban a los pueblos la cultura, las bibliotecas y la educación ciudadana, así como la orientación pedagógica de los maestros de estos pequeños pueblos.
La tercera parte es la más triste , el final del sueño que comparte con su marido Ezequiel, otro maestro republicano. Y la revolución de Asturias en el 34 con la que comienza el fin.
Es una novela donde brilla el amor, pero sobre todo el amor por la educación que hace a los niños iguales y libres. Porque la República había conseguido despertar el deseo de aprender y en los maestros el deseo de enseñar, de educar para que no se pierda ni un sólo talento por falta de oportunidades.
Fue un momento de luz unido a hombres interesados por la educación.Un gran contraste con la sociedad de hoy que ha convertido la educación en un simple instrumento al servicio de la técnica y que, a mi parecer, no tiene nada que ver con que la forma de gobierno sea monárquica o republicana sino de los intereses de la sociedad y de los indivíduos, condicionados por la Economía.
Está dividida en tres partes: Antes del sueño- El sueño -El final del sueño, que señalan las tres épocas de la historia que recorre la protagonista, desde su salida de la Escuela del Magisterio, en Oviedo hasta la Guerra Civil.
Entretanto con la República se pone en marcha un proyecto Educativo innovador: la Institución Libre de Enseñanza,
La creación de la Institución Libre de Enseñanza (ILE) fue obra de FRANCISCO GINER DE LOS RIOS.Eran liberales defensores de la INTERVENCIÓN DEL ESTADO en el aspecto SOCIAL y EDUCATIVO, y de la HONRADEZ y las VIRTUDES PÚBLICAS.
Joaquín Costa aseguraba que hacía falta “un hombre”, un líder que llevase a España por la senda de la modernidad. Pero Giner de los Ríos no le dio la razón. “HACE FALTA UN PUEBLO”, dijo.
Pero un pueblo con educación, entendiendo la educación en su sentido etimológoco: E-DUCO, sacar fuera, extraer todas las posibilidades que cada uno posee. ¿Qué es necesario para ello?. Voluntad y medios, que no es poco.
Después de este inciso entendemos a la protagonista, Gabriela (la madre de la autora, también maestra), que, después de enseñar (aprender a pensar, aprender a vivir) por pueblos hostiles y frios, limitados por la miseria y la geografía, decide hacer algo más y. después de aprobar las Oposiciones ELIGE lo más difícil, enseñar en la Guinea Española. Allí se entrega con entusiasmo a enseñar a unos niños de caras negras y dientes blancos que le sonríen agradecidos. Gabriela está convencida de que "El hambre de África no terminará nunca. África es la víctima del hombre blanco".
Termina esta estapa regresando a la península, después de haber contraído una enfermedad por el clima . Y comienza el sueño de la República con la alegría de las Misiones pedagógicas, que acercaban a los pueblos la cultura, las bibliotecas y la educación ciudadana, así como la orientación pedagógica de los maestros de estos pequeños pueblos.
La tercera parte es la más triste , el final del sueño que comparte con su marido Ezequiel, otro maestro republicano. Y la revolución de Asturias en el 34 con la que comienza el fin.
Es una novela donde brilla el amor, pero sobre todo el amor por la educación que hace a los niños iguales y libres. Porque la República había conseguido despertar el deseo de aprender y en los maestros el deseo de enseñar, de educar para que no se pierda ni un sólo talento por falta de oportunidades.
Fue un momento de luz unido a hombres interesados por la educación.Un gran contraste con la sociedad de hoy que ha convertido la educación en un simple instrumento al servicio de la técnica y que, a mi parecer, no tiene nada que ver con que la forma de gobierno sea monárquica o republicana sino de los intereses de la sociedad y de los indivíduos, condicionados por la Economía.
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